Shanhaiguan, conocida como “El paso entre las montañas y el mar”, es una ciudad en el extremo norte del golfo de Bohai, en China. El origen de su construcción se halla en hacer de fortaleza durante la dinastía Ming, para defender la zona oriental de la Gran Muralla. A pesar de que es un destino turístico muy concurrido por la población china, los extranjeros no suelen visitarlo, a pesar del patrimonio arqueológico que se puede contemplar aquí y de lo tranquilo y hermoso que es el pueblo.
Esta pequeña ciudad muestra al viajero algunas antiguas fortificaciones, restos de la Gran Muralla y varios hermosos paisajes que se pueden ver cómodamente alquilando una bicicleta. Una parada obligada es el ‘Primer Paso Bajo el Cielo‘, una puerta situada en la muralla con un arco coronado por una torre de dos pisos. Su puente levadizo y su arquitectura la convierten en parte de lo mejor del patrimonio histórico de la zona. Además se puede visitar un museo donde se expone numeroso material encontrado en diversas excavaciones, desde armas hasta útiles de cocina.
Los visitantes que quieran hacer compras, podrán conseguir en los alrededores del museo y de la Puerta numerosos objetos de artesanía como palillos decorados, medallones o tallas de jade. En el Museo de la Gran Muralla podrá hacer un recorrido por toda la historia de la región desde los tiempos neolíticos. Un lugar impresionante donde se puede saber más acerca de cómo se construyó la muralla y se pude contemplar una inmensa colección de armas para defender el pueblo y atacar a los invasores, como los sables gigantes.
Un destino casi desconocido que bien merece la pena ser visitado por los amantes de la cultura china que quieran profundizar un poco más en su historia.
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