Al contrario de lo que ocurre en la mayorรญa de paรญses occidentales muy influenciados por la televisiรณn, en India el cine sigue teniendo un gran poder de convocatoria. En prรกcticamente cada pueblo puede encontrarse una sala de cine como poco y se estima que cada aรฑo son millones los espectadores que acuden a las salas para dejarse llevar por la magia de la gran pantalla.
Su industria cinematogrรกfica es la mรกs grande del mundo (muy por encima de la de Hollywood) con una producciรณn de unos 750 filmes al aรฑo. La sede de esta industria es Bombay, conocida con el sobrenombre de Bollywood. Las pelรญculas, para superar las diferencias idiomรกticas y de religiรณn del paรญs, suelen seguir unos gรฉneros y convenciones muy rรญgidas. Las tramas suelen ser fรกcilmente descifrables, pero es algo que no importa demasiado, de hecho, los espectadores suelen ver las pelรญculas varias veces, algo inusual en Occidente.
La pelรญcula tรญpica de Bollywood, de formato “masala”, suele durar unas tres horas e incluye un espectรกculo completo con romance, acciรณn y comedia. Y por supuesto, baile. Unas espectaculares coreografรญas con pegadizas canciones que hace pocos aรฑos originaron una explosiรณn de seguidores en Occidente. Si se viaja a India, entrar en un cine a ver una de estas pelรญculas puede ser una gran experiencia, incluso si no se comprende el idioma.
Antes era muy fรกcil visitar los estudios de cine para los extranjeros y se hacรญan excursiones guiadas, aunque ahora es mucho mรกs complicado, debido al enorme aumento de afluencia. Siempre se pueden ver algunos rodajes los domingos en las calles de Ferry Wharf o tambiรฉn es posible ponerse en contacto con algunos estudios como Mehboob Studios, Natraj Studios o Filmy City para intentar conseguir una invitaciรณn a un rodaje y conocer a las estrellas.
Ademรกs, en las calles de Bombay y de otras capitales de la India, es fรกcil encontrar todo tipo de ‘merchandising’ como bandas sonoras, calendarios y postales con fotos de las actrices y actores mรกs conocidos del paรญs. Una experiencia en la que Oriente y Occidente se dan la mana que puede ser muy grata para los viajeros mรกs curiosos y, por supuesto, los mรกs cinรฉfilos.
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